Todos somos buenos padres, pero este… ¡Este es realmente bueno!

La reacción de un padre se ha hecho viral en distintas webs de educación y p/materndiad de facebook.

Este pasado martes una mamá relataba algo que la había dejado sorprendida mientras estaba con su hijo de dos años en el centro comercial. La reacción y conversación de un padre que estaba sentado en la mesa de al lado cuando su hijo de 6 años derrama un granizado gigante en un local de un centro comercial. Por lo visto no era un granizado al uso, sino uno de esos granizados gigantes y multicoloridos que se gastan en Estados Unidos. El granizado se vertió por toda la mesa…se desramó sobre las sillas y desde ahí se esparció por todo el suelo que quedó cubierto de diminutos trocitos de hielo y líquido de color azul y verde. ¿Qué hubieras hecho tu en su lugar?

A. Perder los nervios

B. Sentir un apuro tremendo

C. Decirle al niño que tiene que tener más cuidado

D. Ayudar al niño a recogerlo

E. Varias de ellas

Puede que pienses que hubieras actuado mal o que estés convencido de que hubieras actuado bien, pero cuando leas la manera en la que este padre aborda el problema te darás cuenta de que este padre…lo hace realmente muy muy muy bien. A veces no se trata sólo de no perder los nervios o de ayudar al niño a ser responsable recogiendo sino de hacer de una situación desventajosa una situación positiva para educar. Este es el post de la mujer que presenció el incidente…(la traducción es bastante clara).

¿Verdad que resulta una actuación genial?

Este hombre utiliza de manera consciente o inconsciente 5 estrategias muy eficaces para ayudar a los niños a adecuar su comportamiento a las situaciones.

1. No pierde los nervios…sólo con eso ya enseña a su hijo dos cosas. La primera es no perder el control en situaciones difíciles. La segunda a desdramatizar los pequeños incidentes del día a día.
2. Le dice al niño que lo van a recoger juntos. Tiene dos aciertos. El primero es enseñar al niño que somos responsables de nuestras acciones y que las debemos reparar. El segundo ayudarle a asumir la responsabilidad para que un día  lo pueda hacer solo.
3. Le dice al niño que tiene que ser más consciente. Una auténtica lección de mindfulness y de la importancia de ser consciente de nuestro cuerpo y nuestro entorno.
4. Le dice que sea consciente la próxima vez. Esto si que es de profesional. Utiliza la memoria prospectiva (un componente de la memoria que se puede programar) para que esté más consciente en situaciones similares que se puedan dar en el futuro.
5. Le dice que los grandes desastres pueden parecer abrumadores. Le ayuda a ser consciente de sus emociones en un ejercicio de inteligencia emocional
6. Le dice que siempre puede pedir ayuda. Una gran lección de inteligencia emocional y solidaridad que le ayudará toda la vida.

Queridos amigos y amigas, cuando lo leía no paraba de pensar…”Qué pro!!! Este padre utiliza muchas enseñanzas de mi curso online pero todas a la vez y de una manera magistral!!!!” Tengo que decir que si hubiera escrito exprofeso un post sobre como gestionar un derrame de líquidos en un bar o heladería no lo hubiera hecho tan bien como él. De verdad, si la actuación de este padre no es hacerlo muy muy bien como padre…la verdad es que no sé lo que es. Bravoooo!!!

Espero que durante estas vacaciones tengáis algún incidente similar y os acordéis de este post!

Por Álvaro Bilbao – Autor de “El cerebro del niño explicado a los padres”