Las vacaciones son para estar tranquilos y disfrutar. Son mi época favorita del año porque es cuando más tiempo puedo pasar y disfrutar con mi hijos. Sin embargo, también sé por experiencia que son una época que puede ser un poco estresante para los padres porque precisamente todo ese tiempo de convivencia puede llevar a que tengamos más conflictos con nuestros hijos, sobre todo si son pequeños y nuestra principal estrategia es tirar de paciencia con ellos.
La realidad es que la paciencia no es muy efectiva, porque como todo el mundo sabe la paciencia se agota antes o después. Eso es algo que comprueban miles de padre de todo el mundo precisamente en los periodos de vacaciones. Puede ser muy difícil convivir 24 horas al día con uno o varios niños pequeños cuando nuestra principal herramienta es la paciencia.
Por eso, los profesionales que trabajamos con niños y familias como psicólogos y maestros recomendamos utilizar otras estrategias mucho más efectivas que nos permiten reservar la paciencia como último recurso y funcionar de una manera mucho más efectiva tanto para los adultos como para los niños. Estas son las cuatro herramientas más efectivas para poder prevenir conflictos con niños pequeños en el día a día y muy especialmente durante las vacaciones.
1.Rutinas
Las rutinas bien diseñadas reducen de forma muy significativa los conflictos.
Prepara una rutina diaria que incluya un itinerario. Eso dará a vosotros y vuestros hijos una sensación de organización relajada y facilitará la colaboración. Recuerda que para realizar una buena rutina es importante enfatizar en el orden de los acontecimientos y no tanto en el horario.
También es importante facilitar que el final de una rutina (por ejemplo, lavarnos los dientes) de inicio a la siguiente (meternos en la cama) porque de esa manera nos ahorramos muchos pasos innecesarios y no tenemos que redirigir al niño tantas veces. Puedes aprender más sobre rutinas en este enlace, aunque creo que esta tabla te ayudará bastante a hacerte una idea de cómo puedes organizar rutinas de una forma positiva durante estas vacaciones.
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Conexión
Los niños pequeños necesitan confiar en las personas que les guían. Las vacaciones son un tiempo genial para disfrutar y conectar con tus hijos.
Aprovecha los ratos de juego, los momentos en los que esté de mejor humor, pero también los ratos en los que estén más cansados o enfadados para mostrarles que incluso ahí tu estás conectado con sus emociones y te ocupas de su bienestar.
¿Por qué la conexión funciona para prevenir conflictos en los niños?
Cuando un niño se siente querido y comprendido por los padres nace en él o ella una conexión única y especial. Esa conexión que tienes con tu mejor amiga o con esa compañera del trabajo que hace que le acompañes a tomar café aunque a tí en ese momento no te apetezca mucho.
La conexión nos hace querer ayudar al otro aunque en ese momento no compartamos su mismo interés o preocupación y al igual que tú puedes acompañar a tu amiga a por ese café tus hijos son más proclives a ayudarte en tus tareas como padre o madre, aunque no les apetezca en ese momento tanto, símplemente porque están más dispuestos a facilitarte las cosas.
La verdad es que la conexión es algo que se construye en el día a día, aunque las vacaciones y el tiempo de disfrute en familia suele ser especialmente positivo para construir esa relación positiva que facilitará que tu hijo y tú estéis más conectados.
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Empatía
La herramienta más eficaz para solucionar situaciones difíciles es la empatía. Conectar de forma positiva con las emociones del niño ayuda al niño a sentirse más seguro y acompañado en su malestar y que se sienta mejor antes.
Mira como funciona en la siguiente imagen
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Educa en positivo
Los gritos, amenazas y castigos pueden resolver un problema puntual pero generan más problemas a largo plazo. Una educación centrada en la comunicación, la confianza y el respeto permite que los gritos, amenazas y castigos no sean necesarios. Es lo que llamamos Educación en Positivo. Veamos un ejemplo muy sencillo:
La verdad, es que la educación en positivo tiene muchos beneficios tanto para los padres como para los niños como puede ser el de tener menos conflictos, mejorar su comunicación o favorecer en los niños una mayor confianza y autoestima. Este es sólo un ejemplo muy sencillo de cómo la educación en positivo os puede ayudar a vosotros y a vuestros hijos, pero la educación en positivo ofrece soluciones prácticas y ejemplos para todo tipo de situaciones como cómo actuar ante peleas entre hermanos, cómo favorecer una mejor colaboración, qué hacer cuando no quieren apagar la televisión o cómo ayudarles a colaborar sin negociar o quejarse tanto. En este enlace puedes aprender y ver muchos otros ejemplos para todo tipo de situaciones.
¿Es efectivo?
Es posible que te estés preguntando si estas cuatro estrategias que te acabo de explicar son 100% efectivas. La respuesta es NO. No hay nada 100% efectivo y mucho menos cuando se trata de niños. En ese sentido puedo decirte que estas estrategias no son infalibles, pero sí son ALTAMENTE EFECTIVAS. Te puedo asegurar que si se aplican de la forma correcta y con amor son tremendamente efectivas para prevenir conflictos y favorecer una convivencia positiva en vacaciones y durante todo el año. Puedes aprender mucho más acerca de Educación en Positivo aquí.
Estoy de acuerdo en todo
increiblemente”pequenos cambios que producen enormes resultados”.
El problema que yo veo, es cuando intentas empatizar con el niño, hablarle, e intentar de forma calmada que te cuente por qué ha hecho algo, o que se calme, y el niño sin embargo, está en una especie de bucle que ni escucha, ni te presta atención y no hay manera de conectar con él.
Entonces me pregunto qué se hace en estos casos, porque al final, acabo perdiendo la paciencia.