Hablar con un niño puede ser como hablar con la pared, sobre todo si sientes que tu hijo no te escucha cuando le hablas. Aunque no debemos cargar toda la responsabilidad sobre ellos, ya que los padres también podemos dificultar la comunicación. Es cierto que a los niños les resulta difícil prestar atención a lo que no está en su lista de prioridades, pero podemos tomar medidas para mejorar la situación. Descubre cómo hacerlo para mejorar la comunicación con ellos.
1. Elimina distracciones
Muchos problemas de comunicación entre padres e hijos surgen cuando los niños no escuchan lo que sus padres están diciendo. Es prácticamente imposible que un niño preste atención si la televisión o los juguetes están captando toda su atención. Por lo tanto, el primer paso para garantizar que el niño escuche es eliminar estas distracciones. Puede ser necesario apagar la televisión, esperar a que el niño termine de jugar o simplemente llevarlo a un lugar tranquilo sin interrupciones.
2. Ponte al nivel de sus ojos
Todos solemos prestar más atención a lo que estamos mirando en lugar de escuchar lo que se dice a nuestro alrededor. Si tu hijo no escucha y quieres que realmente se concentre en lo que estás diciendo, es importante hablarle dentro de su campo visual. En ocasiones, esto implica agacharse para estar a su altura y establecer una conexión visual más directa. Este gesto puede ser especialmente efectivo para captar su atención y asegurarse de que te está escuchando con atención.
3. Capta su atención
Ponerse frente a sus ojos facilita la comunicación visual. Además, tocar su hombro para captar su atención o esperar a que te miren antes de comenzar a hablar son prácticas comunes. Personalmente, añado dos preguntas útiles en este proceso. La primera es: “¿Me estás escuchando?”, lo que permite confirmar que el receptor está atento. La segunda pregunta es: “Repíteme lo que acabo de decir”, para asegurar que el mensaje se ha recibido y para ayudar al niño a procesarlo, comprenderlo y recordarlo.
4. Cumple tus advertencias
No se trata de amenazar ni de mantener al niño en un estado de alerta, ya que un cerebro asustado escucha peor. Sin embargo, es esencial cumplir con lo que se dice, ya que los niños aprenden a valorar tus palabras en función de tu coherencia. Si prometes apagar la televisión, es importante hacerlo. Si avisas que los bañarás, hazlo. Si tu hijo no escucha cuando le hablas, haz que perciba que cumples tus palabras. Se sentirá más motivado para escucharte, ya que sabe que tus promesas se hacen realidad.
5. Que no escuchar no sea una opción
El cerebro tiende a buscar la opción de menor esfuerzo. Si un niño descubre que no prestando atención a lo que dices lo dejas tranquilo, optará por esa opción porque es la más fácil. En cambio, si comprende que la forma más sencilla de continuar con sus actividades es escucharte y seguir tus instrucciones, mostrará un mayor interés en prestar atención. Trata de establecer expectativas claras y consecuencias naturales para fomentar la obediencia y el cumplimiento de las responsabilidades.
6. Refuérzale cuando escuche
Si quieres saber porque tu hijo no te escucha o no presta atención es porque, cuando lo hace, a menudo recibe críticas y reproches de sus padres, como “Ya era hora”, “Ojalá obedecieras así siempre” o “¡Ya te ha costado!”. Estas expresiones no fomentan la motivación del niño para escuchar a sus padres, sino que tienen el efecto contrario. Es más efectivo reconocer su cooperación con frases como “Gracias”, “¡Has respondido muy rápido!” o simplemente mostrándoles aprecio, como acariciándoles la cabeza.
7. Se un buen modelo
Cuando alguien se dirige a ti, es esencial que les prestes atención y evites distracciones como el teléfono o la televisión. Si quieres enseñar a escuchar a tus hijos muestra un interés genuino en lo que están diciendo, centrándote en su comunicación tanto en tu atención como en tu postura corporal. Este consejo es importante, ya que los niños aprenden principalmente del ejemplo que ven en sus padres, más que de sus palabras. Por tanto, ser un buen oyente es una lección valiosa para transmitir.
La comunicación efectiva con nuestros niños es esencial para construir relaciones sólidas y saludables. Si tu hijo no te escucha cuando le hablas, recuerda que hay estrategias que pueden ayudar a mejorar esta situación. Mantén la paciencia, el respeto y la empatía en el centro de tu relación, y ten en cuenta que el ejemplo que estableces como padre o madre tiene un impacto significativo en cómo tu hijo aprende a comunicarse.
Por Álvaro Bilbao. Autor de El cerebro del niño explicado a los padres.
Buenos días, en el año 2021 me inscribí en el curso educar en positivo y nose si es el mismo que se imparte ahora, entonces mi pregunta es si puedo inscribirme en el resto de cursos que hay. Nose si podrían informarme de los cursos que hay. Además tengo 4 niños de entre 3 y 9 años, me ayudaría para aprender a gestionar con los 4? Muchas gracias
Super útil esta información, sobre todo porque estoy sintiendo que de verdad hablo solo cuando de hablar con mi hija de 2 años y medio, se trata.
gracias