Si te aparece que el Taller está CERRADO asegúrate de estar registrad@ con tus datos de acceso, ya que únicamente quien lo ha comprado y está dentro de su cuenta puede visualizarlo.
Un taller en el que aprenderás las estrategias para comprender y poder ayudar a niños y niñas con un carácter fuerte.
Sí, el carácter se educa
¿Tu hijo o hija se enfada con rapidez o por cualquier cosa? ¿Sientes que todo es una negociación? ¿Su carácter hace que, con frecuencia, evitéis mantener una norma o decir “no” por miedo a sus enfados? Si has respondido con un “sí” a cualquiera de estas preguntas es muy probable que tengas un hijo o hija con mucho carácter, lo que significa que tengo un mensaje importante para ti:
Los niños y niñas con mucho carácter no son malos, ni te quieren hacer la vida imposible. En realidad, suelen ser los niños más incomprendidos de todos.
Esto es así porque muy pocos padres entienden realmente de dónde vienen esas reacciones y cómo gestionarlas para que sus hijos se desarrollen adecuadamente.
Si tienes un hijo/a con mucho carácter lo último que necesitas sentir es que es más difícil que el resto o que no sabes cómo atajar el problema. Lo que necesitas es aprender las estrategias prácticas y eficaces que te ayudarán a recuperar la confianza y el control, para reducir los conflictos dentro y fuera de casa.
Justo lo que voy a enseñarte en este taller.
120 minutos en los que…
✓ Comprenderás bien los rasgos que hacen un carácter fuerte
✓ Podrás prevenir que esos rasgos de carácter se intensifiquen en el futuro
✓ Resolverás conflictos sin renunciar a los límites y las normas
✓ Aprenderás las estrategias más eficaces para educar a niños con mucho carácter
✓ Sabrás cómo actuar con amor, calma y firmeza ante desafíos o situaciones difíciles
✓ Te sentirás más segura/o y en control
El taller de Niños con mucho carácter es para ti si…
- Tienes hijos entre 2 años y 12 años de edad
- Quieres comprender qué hace que tu hijo/a tenga ese carácter
- Quieres tener menos conflictos sin renunciar a ser firme con las normas
- Te estás volviendo permisivo porque te da miedo decir “no” o “poner normas”
- Te gustaría recuperar el control en muchas situaciones cotidianas
- Y lo más importante…quieres recuperar la conexión emocional con tu hijo/a
